Programa Actualización Científica sin Exclusiones (ACisE)

Informes comentados

dispuestos por fecha de ingreso a SIIC

Informe
Autor del informe original
DR Lakkireddy
Institución: Kansas City Heart Rhythm Institute & Research Foundation,
Kansas City EE.UU.

Repercusión de la Pandemia por COVID-19 en la Electrofisiología
Se describe el impacto del COVID-19 sobre las arritmias cardíacas y se proporciona orientación para el abordaje de procedimientos electrofisiológicos, visitas y control de dispositivos.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/163341

Comentario
Autor del informe
Daniel Víctor Ortigoza 
Hospital Sirio Libanés, Ciudad de Buenos Aires, Argentina


El COVID-19, enfermedad viral causada por el SARS-CoV-2 originaria de Wuhan, China (diciembre del 2019) rápidamente se declaró como pandemia con un notable impacto en la salud global y en la economía del mundo. La transmisión viral persona a persona es de notable importancia para la práctica cardiológica de electrofisiología, y conociéndola, podemos evitar el contagio de pacientes y del personal de la salud.
Cuando afecta el COVID-19 lo hace preponderantemente de manera leve y solo una pequeña proporción de pacientes son internados y de estos unos pocos, pueden requerir una unidad de cuidados intensivos (UCI), al ingresar al del sistema respiratorio y dar una respuesta inflamatoria local que puede generalizarse, y tomar otros órganos, y así,
afectan al sistema cardiovascular, provocando arritmias en un 16% de los hospitalizados, y el 44,4% de los que requieren estadía en UCI, los cuales tuvieron arritmias, muchas de ellas, taquicardia ventricular/ fibrilación ventricular/ torsión de punta (TV/FV/TsP). La mortalidad por toda causa fue del 1-5 %.
Un paciente con COVID-19, puede transmitir la enfermedad por gotitas de Fulge, en contacto con sus secreciones, o la aerosolización viral (dispersión aérea contaminada) durante el aporte de oxígeno o el tratamiento con ventilación mecánica; estando los pacientes sintomático, asintomático o pre- sintomático (24 a 72 hs de comenzar con síntomas) por lo cual radica un verdadero problema para el paciente, los familiares cercanos, personal de los hospitales y consultorios médicos. Por ello es tan importante un buen uso del equipo de protección personal (EPP), por ejemplo: purificadores, máscaras N95, guantes, gafas, camisolines hidrófugos, etc.; delimitar zonas limpias y zonas sucias para el correcto reemplazo de la indumentaria protectora y el correcto manejo de los materiales contaminados y desechos biológicos.
Necesitamos remarcar prioridades, lo urgente de lo no urgente, lo ambulatorio de lo internado; de esta forma tendremos un distanciamiento deseado evitando el contacto persona a persona, debemos prestar atención en la correcta higiene de los materiales usados, de los elementos compartidos (computadoras, amoblamientos, electrocardiógrafos, holters, elementos de laboratorios etc.), además tengamos en cuenta que la tasa de transmisión en el ambiente de salud es muy frecuente” transmisión horizontal”, personal de la salud a personal de la salud.
La afección miocárdica, expresadas con la elevación patológica de la troponina T (tnT) y la insuficiencia cardíaca (IC), en un porcentaje del 17% y 23 %, respetivamente en pacientes estudiados retrospectivamente por Zhou F, et al. Lancet, Marzo, 2020, en Wuhan.
La hipoxemia, el estado inflamatorio generalizado, los trastornos hidroelecrolítico, uso de drogas inotrópicas, antivirales, anti-palúdicas, inmuomoduladores, antibióticos favorecen a un estado proarrítmico que requiere un monitoreo frecuente de los parámetros vitales, monitoreo distancia (con preferencia) y medición del QT corregido (QTc). Procedimientos Electrofisiológicos invasivo y no invasivos
Deben basarse en decisiones clínicas individuales para cada paciente, teniendo en cuenta la edad, concomitancias y el peligro de vida inminente (inmunocomprometidos, embarazadas, mayores de 60 años, etc.), de esta forma se reorienta los recursos del sistema de salud y se protege a los más vulnerables a padecer complicaciones. -Posponer procedimiento electivo invasivo no urgentes.
Los procedimientos tomados como urgentes o de emergencia
Deberían ser realizado en pacientes compensados, que no responden a fármacos, tratando de realizar un delgado equilibrio entre la elevada tasa de mortalidad de este grupo de pacientes y la posibilidad de contagio por aerosolización (manejo de vías aéreas, ventilación mecánica etc.) Si fuera indispensable, usar filtros antivirales en tubuladuras de ventilación pulmonar.
-Ablación de TV, tormentas eléctricas no controladas con medicación.
-Ablación con catéter de taquicardias incesantes, con severidad de síntomas, taquicardias supraventriculares (TSV), fibrilación auricular (FA).
Ablación con catéter para el síndrome de Wolf-Parkinson White (SWPW), o Fa preexcitada con síncope o paro cardíaco.
-Revisión de mal funcionamiento de marcapasos (MCP) y desfibriladores automáticos implantables (DAI) con terapias inadecuadas.
-Cambio de generadores de MCP con indicación de reemplazo electivo (ERI) o final de su vida útil (EOL). Si tienen poco resto de batería, ver en contexto clínico.
-Implante de MCP para bloqueos AV Mobitz II o AV de alto grados, pausas sinusales extensas.
-Infecciones periquirúrgicas posimplante de MCP.
-Terapia de resincronización en IC refractaria grave.
-CV en arritmias rápidas sintomáticas, refractarias al tratamiento médico.
-Evitar eco-transesofágico.
Procedimientos semi-urgentes
-Ablación TV recurrente, refractaria al tratamiento médico (TM) -Ablación de TSV refractaria a TM que concurre a guardia médica.
-Reemplazo del generador de DAI o MCP en estado ERI que no es urgente o de emergencia.
-Prevención primaria con DAI con peligro de muerte por arritmias malignas.
Procedimientos no urgentes, electivos
Si no cumplen con los criterios de urgencias o emergencia. Tratar de retrasar o reprogramar los procedimientos.
-Ablación de extrasístoles ventriculares (EV), TSV, FA y aleteo auricular (AA) con altas comorbilidades.
-Evaluación Electrofisiológica para taquicardias estables o bradicardias.
-Prevención con DAI no semi-urgente.
-Terapia de resincronización cardiaca (TRC) en pacientes estables y actualizaciones de DAI.
-Implante de MCP para bloqueos AV Mobitz I u otros AV de alto grados estables, síndromes taquibradicardia (STB) con síntomas leves.
-Reemplazo de generador e MCP con una batería restante mayor a 6 semanas.
-Extracción de dispositivos y cables no infectados que requieran y su re implante.
-Cierre de orejuela (LAA) en pacientes anticoagulados.
Evaluación de rutina de ecotransesofágico, por ej.: valvulares, LLA y cardioversión luego de una correcta anticoagulación.
-Implante de grabadoras Subcutanes IGS).
-Prueba de Tilt Test.
Consideraciones
Siempre que sea posible y el estado clínico del paciente lo permita, debemos tener visitas no presenciales, orientadas por teleconferencias, monitoreo remoto, llamadas a telefonía móvil, telefonía fija en su domicilio, chateo, etc., de esta forma, si la estabilidad del paciente lo permitiera, se evitaría riesgos de propagación viral.
Siempre se debe ventilar los ambientes, limpiar los elementos usados, cables etc., antes y luego de cada paciente atendido en la modalidad presencial, dedicándonos a la antisepsia rigurosa de todos los EPP.
Se necesita controles de DAI, cuando pesquisamos anomalías por medio remota, o sin modalidad remota que padecen choques, sintomatología como síncopes, palpitaciones extensas en el tiempo etc., para poder realizar eventual reprogramaciones. Si no hay Urgencias, retrasar resonancias magnéticas, previa verificación de normas de fábrica y estado clínico del paciente.
Tener en cuenta el monitoreo de el QTc en pacientes con COVID-19 y uso de hidroxicloroquina, azitromicina, inmunomoduladores, antivirales, digoxina, amiodarona, trastornos del medio interno, e insuficiencia hepática y renal.
Conclusión
En esta pandemia el sistema de salud y los pacientes enfrentamos una enfermedad transmisible conocida muy recientemente, donde lo importante es apoyar, enseñar y tratar de asistir al paciente, en lo posible de forma remota y si la clínica del paciente con arritmias no lo permite, tomar todos los recaudos para no contagiar, ni ser contagiado, resolviendo las diferentes problemáticas cuidando los recursos de salud.
Copyright © SIIC, 2020

Especialidades
C.gif   MI.gif        AH.gif   AP.gif   Ci.gif   DI.gif   E.gif   I.gif   MF.gif   SP.gif   
Informe
Autor del informe original
SK Brooks
Institución: King’s College London,
Londres Reino Unido

Impacto Psicológico de la Cuarentena
Esta revisión indica que la cuarentena se asocia con frecuencia con efectos psicológicos negativos.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/163312

Comentario
Autor del informe
Olga Stella Díaz Usme 
Directora, Universidad El Bosque, Bogotá, Colombia


El resumen “El impacto psicológico de la cuarentena y cómo reducirlo: una revisión rápida de la evidencia” título original The psychological impact of quarantine and how to reduce it: rapid review of th evidence (The Lancet Vol 395, issue 10227, P912-920, Mar 14, 2020) sintetiza y analiza la evidencia de 24 artículos originales, relacionados con el tema, recuperados y seleccionados de bases de datos.
Llama la atención en primer lugar, como lo evidencian los autores, el uso indiferenciado de los términos cuarentena y aislamiento; siendo necesario, en pro mayor claridad en la información que se brinda a la comunidad, no solo hacer evidente la diferencia entre ellos sino también utilizarlos de manera precisa. Sin embargo, es pertinente que a futuro los estudios incluyan la
categoría “distanciamiento social” y “distanciamiento emocional” pues en la condición derivada de la pandemia por COVID-19 coexisten estas tres modalidades. Es de prever que estos podrían instaurarse en las comunidades como una expresión de asimetría e inequidad social, que acentúa los fenómenos de exclusión y xenobofía, legitiman y originan categorías estigmatizantes, no sólo para quienes han sido diagnosticados con la enfermedad sino también para sus familias, el personal de salud que brinda atención, la red de servicios que en razón a su trabajo tiene contacto con la población en general: conductores, cajeros en supermercados, repartidores de domicilios, etc.
Superada esta reflexión y retomando el propósito del artículo, se hace referencia a las acciones a desarrollar con el propósito de atenuar el impacto psicológico de la cuarentena. Si bien es evidenteque los estudios identifican que, sobre el grupo de trabajadores en salud, que experimentaron cuarentena, recaen las mayores consecuencias también se identifica que de una parte no es posible plantear relaciones directas, unicausales y de otra que las consecuencias pueden ser diversas y perdurar en el tiempo; conclusiones que ponen de manifiesto la necesidad de incorporar en los protocolos de atención acciones de protección entre ellas estrategias de debriefing psicológico que además de posibilitar la expresión de emociones y pensamientos favorezcan reconocer, aceptar y redireccionar estrategias de afrontamiento como el distanciamiento y la negación que si bien tienen un efecto protector su mantenimiento en el tiempo se asocia a alteraciones de la salud mental entre ellas depresión, ansiedad, agotamiento y tendencia al asilamiento.
En la síntesis de los factores identificados como estresores durante la cuarentena, se señala que una duración mayor a diez días se asocia con la aparición de estrés postraumático; no se describen los efectos que genera la prolongación de la misma y se hace necesario indagar sobre el impacto de la incertidumbre frente al levantamiento de la misma en la salud mental o del incremento de la restricción del contacto. Si bien es cierto se hace referencia a la frustración derivada de la restricción en la rutina cotidiana, es necesario analizar el efecto que genera el ver interrumpido el proyecto de vida o enfrentar la frustración en deportistas, artistas y personas que durante largos periodos se preparan para llevar a cabo una actividad que puede definir su futuro personal y profesional. Los aspectos mencionados y otros que señala el documento son de importancia central, sin embargo, quisiera llamar la atención sobre el rol de los medios y la calidad de la información que se brinda a la comunidad. Como bien lo señalan los autores, la información clara, pertinente y de calidad en los diferentes momentos no solo favorece el establecimiento de prácticas de protección y cuidado basadas en evidencia, sino también, minimiza la implementación de prácticas de riesgo, la percepción de incertidumbre y atenúa la presencia de prejuicios que sirven de soporte al estigma, en cualquiera de sus expresiones. Es importante considerar que los niveles de incertidumbre a medida que avanza la pandemia se incrementan y que con la tendencia al retorno a las actividades aparecen nuevos generadores de ansiedad sobre los que el acceso a información de calidad cumple un papel fundamental. A nivel de salud mental comunitaria es importante que el sector salud lidere el desarrollo de estrategias articuladas a nivel transectorial en las que se incorpore tanto la respuesta individual, como los determinantes sociales asociados a la misma, las trayectorias del curso de vida, la identificación de las dinámicas relacionales del individuo, sus redes de apoyo y su entorno así como el acceso a servicios e iniciativas de soporte institucional y gubernamental en diferentes niveles.
En síntesis, la revisión evidencia que a la par de las medidas de contención de propagación del COVID-19 deben implementarse en la comunidad estrategias que desde el reconocimiento y normalización de la respuesta en crisis como “normal ante una situación anormal” se aproximen a su identificación, análisis y comprensión.
Copyright © SIIC, 2020

Palabras Clave
cuarentena, aislamiento del paciente, desenlaces psicológicos, impacto psicológico, brote de enfermedad por coronavirus 2019
Especialidades
I.gif   SM.gif        AP.gif   Ep.gif   Ge.gif   MF.gif   MI.gif   P.gif   SP.gif   
Informe
Autor del informe original
A Tagarro
Institución: Hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes,
Madrid España

Enfermedad por Coronavirus 2019 (COVID-19) en Niños
Durante las dos primeras semanas de la epidemia de COVID-19 en Madrid, el 60% de los niños con infección confirmada (25 de 41) debieron ser internados y 4 de 41 (9.7%) requirieron internación en unidades de cuidados intensivos pediátricos; estos 4 pacientes necesitaron asistencia ventilatoria (sólo uno de los 4 enfermos [25%] tenía enfermedad respiratoria subyacente).

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/163340

Comentario
Autor del informe
Nadia Laura Belloni 
Docente, Universidad Nacional de Rosario, Rosario, Argentina


La pandemia causada por el coronavirus 2019 (COVID-19) se ha mostrado única por su capacidad de diseminación en un mundo globalizado. Actualmente es un problema de salud pública mundial, y en Argentina es un tema prioritario en la agenda sanitaria. Los autores realizaron un análisis de la información para los casos confirmados de COVID-19 en pacientes pediátricos en Madrid, España, durante las dos primeras semanas de la epidemia y describieron la gravedad de la enfermedad en dicha población. Los primeros casos en España, se comunicaron el 31 de enero 2020, y en Madrid el 27 de febrero 2020. En las últimas semanas la pandemia ha alcanzado nuestras latitudes, registrándose el primer caso confirmado en Argentina el 3 de marzo
2020, 32 días después que en España y el primer caso confirmado en Rosario (provincia de Santa Fe) el 14 de marzo 2020, 16 días posteriores a Madrid.
Los autores analizaron el registro de casos estudiados entre el 2 y 16 de marzo de 2020 en 30 hospitales de segundo y tercer nivel en Madrid. Se siguieron los lineamientos de la Spanish Public Health Recommendations para protocolizar los criterios de atención, internación y abordaje de los pacientes con signo-sintomatología sospechosa de COVID-19. También se analizaron los riesgos atribuibles a las comorbilidades, en caso de presentarlas. El diagnóstico se confirmó con reacción en cadena de polimerasa con trasncriptasa reversa (RT- PCR) en tiempo real, determinación que cuenta con una especificidad del 95% y una sensibilidad de entre el 32% al 63% según distintos reportes. Se testearon 365 pacientes pediátricos. Hacia finales de la segunda semana, 0.8% de los pacientes confirmados eran menores de 18 años. La mediana de edad de los pacientes estudiados fue de 3 años, en tanto la mediana de edad de los casos confirmados fue de 1 año. De los pacientes confirmados, el 60% ingresaron a internación, de ellos un 9,7 % en Unidades de Cuidados Intensivos Pediátricos, requiriendo asistencia ventilatoria. El 25% de estos pacientes tenían comorbilidades asociadas, tratándose de sibilancias recurrentes. No se registraron fallecimientos. Como manifestaciones clínicas iníciales se describieron: síntomas respiratorios de vía aérea superior (34%), fiebre de origen desconocido( 27%), neumonía de tipo viral(15%), bronquiolitis (12%), gastroenteritis o vómitos ( 5%), neumonía de tipo bacteriano (5%) y exacerbación asmática (2%). En un 5% de los pacientes se comprobó coinfección con virus de influenza B.
Los resultados obtenidos en este trabajo coinciden con publicaciones previas, en el bajo porcentaje de pacientes afectados menores de 19 años.
En Madrid, el 60% de los pacientes confirmados requirieron hospitalización por presentar formas graves de la enfermedad (hipoxia con porcentaje de saturación de oxígeno menor a 92%) mientras que en China, sólo el 2,8% de los niños confirmados fueron internados. Los autores atribuyeron el alto porcentaje de internaciones en Madrid a la cantidad de pacientes testeados en una primera etapa en España, ya que inicialmente solamente los niños en contacto con pacientes COVID-19 confirmados eran sometidos al test. Este criterio se modificó rápidamente cuando Madrid se declaró área de transmisión comunitaria del virus, momento a partir del cual la indicación para testear a pacientes pediátricos incluyó pacientes hospitalizados, con comorbilidades o riesgo de complicaciones. Los autores concluyeron que el porcentaje de niños con COVID-19 confirmado fue del 11%, pudiendo presentar formas graves algunos de ellos. Se reconocieron las limitaciones relacionadas con la sensibilidad del test, debido a eso sugirieron que el número de pacientes pediátricos infectados pudo haber sido mayor. Resaltaron la necesidad de mayor casuística para poder conocer con precisión las características clínicas y el pronóstico del COVID-19 en pediatría. Toda la evidencia científica producida con la información recabada en los sitios donde se generó y propagó inicialmente la epidemia es de suma importancia para ser considerada al momento de elaborar estrategias y políticas de salud pública para afrontar la pandemia en Argentina. Copyright © SIIC, 2020

Palabras Clave
rastreo, gravedad, enfermedad por coronavirus 2019, COVID-19, niños
Especialidades
I.gif   P.gif        AP.gif   EdM.gif   Ep.gif   MF.gif   MI.gif   N.gif   
Informe
Autor del informe original
A Tagarro
Institución: Hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes,
Madrid España

Enfermedad por Coronavirus 2019 (COVID-19) en Niños
Durante las dos primeras semanas de la epidemia de COVID-19 en Madrid, el 60% de los niños con infección confirmada (25 de 41) debieron ser internados y 4 de 41 (9.7%) requirieron internación en unidades de cuidados intensivos pediátricos; estos 4 pacientes necesitaron asistencia ventilatoria (sólo uno de los 4 enfermos [25%] tenía enfermedad respiratoria subyacente).

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/163340

Comentario
Autor del informe
Elizabeth Yamila Sapia 
Hospital de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez, Ciudad de Buenos Aires, Argentina


En el contexto de la pandemia por coronavirus se realizó un estudio descriptivo multicéntrico en la población pediátrica, durante la primera quincena de marzo y participaron 30 hospitales de nivel secundario y terciario de la ciudad de Madrid, España.
El objetivo del estudio fue determinar la proporción de pacientes confirmados con coronavirus en relación al total de pacientes estudiados, así como la gravedad de la enfermedad en niños.
Se pesquisaron los pacientes según las recomendaciones de Salud Pública española. Se incluyeron los pacientes con enfermedad sintomática con criterio de internación, así como aquellos con signos y síntomas compatibles con COVID-19 con riesgo de complicaciones por su enfermedad de base. El método diagnóstico empleado para detectar COVID-19 fue la reacción en cadena de la polimerasa en
tiempo real (RT-PCR).
Se incluyeron 365 pacientes pediátricos (0 a 15 años) de los cuales 41 pacientes (11,2%) tuvieron resultado para coronavirus positivo sobre un total de 4695 casos confirmados (0,8%).
El 60% fue hospitalizado y el 10% ingresó a unidad de terapia intensiva pediátrica para asistencia respiratoria (1 paciente requirió asistencia respiratoria mecánica, 1 ventilación de alto flujo y 2 pacientes ventilación no invasiva).
El promedio de edad de los pacientes fue de un año. Ningún paciente falleció. Los diagnósticos que presentaron fueron: infección de vías aéreas superiores en el 34%; fiebre sin foco en el 27%; neumonía viral en el 15%; bronquiolitis en el 12%; gastroenteritis o vómitos en el 5%; neumonía bacteriana en el 5% y crisis asmática en el 2%. Dos pacientes (5%) tuvieron coinfección con virus influenza B. Los resultados del estudio coinciden con los trabajos ya publicados que describen el 2% de los enfermos son menores de 19 años. Llama la atención el alto porcentaje de internación en las infecciones confirmadas, se podría justificar porque inicialmente sólo se estudiaba a los niños con contacto con una persona con COVID-19 pero luego Madrid fue declarada ciudad de transmisión comunitaria para el virus y la recomendación fue estudiar sólo a los niños internados con síntomas y signos de COVID-19 o pacientes con comorbilidades y riesgo de complicaciones. Por lo tanto los resultados pueden estar sesgados a una población con manifestaciones moderadas a severas de la enfermedad.
Interesante es destacar las limitaciones del trabajo, los autores hacen referencia a la sensibilidad del método diagnóstico para el hisopado nasal y faríngeo tiene una sensibilidad entre el 32 al 63%.
Las infecciones en niños inician precozmente en la epidemia por COVID-19. La relación entre pacientes confirmados y aquellos con síntomas compatibles fue del 11%. La enfermedad por coronavirus en niños puede presentarse en forma grave y requerir el ingreso a unidad de cuidados intensivos pediátrico o el uso de ventilación de alto flujo.
Copyright © SIIC, 2020

Palabras Clave
rastreo, gravedad, enfermedad por coronavirus 2019, COVID-19, niños
Especialidades
I.gif   P.gif        AP.gif   EdM.gif   Ep.gif   MF.gif   MI.gif   N.gif   
Informe
Autor del informe original
ML Rolin Neto
Institución: School of Medicine of Juazeiro do Norte–FMJ/Estácio,
Juazeiro de Norte Brasil

La Cuarentena Masiva Aumentaría Sustancialmente la Ansiedad
La mayoría de los profesionales de la salud que trabajan en unidades de aislamiento y hospitales no reciben capacitación para brindar contención psicológica.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/163345

Comentario
Autor del informe
Indiana Miño 
Concordia, Argentina


Los autores del artículo al cual se refiere el resumen LA CUARENTENA MASIVA AUMENTARÍA SUSTANCIALMENTE LA ANSIEDAD, ante la observación de la situación generada por el brote de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por sus siglas en inglés), han analizado el impacto emocional de la pandemia en pacientes y trabajadores de la salud.
Es así como han podido determinar que quienes requerirían una atención personalizada son los adultos mayores y los trabajadores migrantes internacionales. Los adultos mayores son susceptibles, no sólo al virus sino también a la angustia, la soledad y las limitaciones de acceso a la atención presencial o virtual. Todo lo cual puede potenciarse si hablamos de personas con afecciones preexistentes.
Se observan, también, las diferencias entre la capacidad de respuesta
de los servicios de salud mental, la resistencia de los trabajadores de salud y sistemas médicos que se enfrentan a un desafío que parece casi desproporcionado para los estándares conocidos. En medio de todo esto, la mayoría de los profesionales de salud que trabajan en unidades de aislamiento y hospitales no reciben capacitación para brindar atención de salud mental. Por el contrario, a menudo deben lidiar con sus experiencias en medio de la presión, el cansancio y las vivencias compartidas que, muchas veces, sólo potencian la sensación de agobio y pueden llevar a tomar medidas desesperadas.
Durante el encierro, el aumento de información, el número de nuevos casos y el conteo permanente de muertes impacta constantemente en las personas, generando probablemente más miedo, depresión y ansiedad.
Lo más importante de este estudio, quizás sea entonces, las posibilidades que abre al considerar el aumento de la ansiedad durante el encierro. Es más, el artículo ya menciona nuevas estrategias de intervención que comprenden a equipos de salud y herramientas tecnológicas, así como un modelo que integre todo el proceso, es decir, desde la detección del síntoma hasta la rehabilitación posterior.
Conocer las poblaciones más afectadas implica la responsabilidad de –en el caso de adultos mayores- pensar en brindar el acompañamiento necesario a través de diversas opciones de intervención, sean virtuales o quizás, a través de su entorno.
En el caso de los trabajadores de salud, tal vez sea necesario reconocer la necesidad y la importancia de capacitarlos en recursos primarios de intervención psicológica, como la escucha empática, comunicación emocional y el registro continuo y personal de sentimientos para reconocer cada momento de la crisis y poder actuar en consecuencia atendiendo a las necesidades básicas, tanto propias como de los pacientes.
En conclusión, tener en cuenta lo expuesto en el artículo podría ser importante para comenzar a elaborar y definir nuevas medidas de salud, con respecto al encierro en sí –tanto en su forma y duración- o a la búsqueda de alternativas más saludables, primero dentro del contexto urgente e inevitable de la pandemia y luego en proyección hacia un futuro basado en los complejos aprendizajes del presente.
Copyright © SIIC, 2020

Palabras Clave
COVID-19, salud mental, problemas psicológicos, emergencias, cuarentena
Especialidades
I.gif   SM.gif        CI.gif   E.gif   En.gif   Ge.gif   MI.gif   N.gif   SP.gif   
ua40317