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El régimen diario de diálisis constituye la opción del nuevo milenio; sin embargo pese al entusiasmo que esta novedad ha causado alrededor del mundo son aún pocos los pacientes que pueden experimentarla, en particular por ciertas limitaciones clínicas y técnicas.En relación con la existencia de datos controvertidos, investigadores del Departamento de Medicina Interna de la Universidad de Turín, desarrollaron un programa de diálisis diaria y efectuaron un estudio con el objetivo de describir la estrategia de implementación y los resultados en los tres primeros años, centrados esencialmente en la factibilidad del programa, la adherencia y las preferencias de los pacientes.El diseño fue realizado en una unidad satélite del Centro Universitario, entre noviembre 1998 a noviembre 2001. El régimen de diálisis diaria fue propuesto para todos los pacientes que quisieron adherirse a este régimen y el único requisito previo fue la posibilidad de realización de la diálisis fuera del ámbito hospitalario, con el acuerdo de sus cuidadores habituales.En el período estipulado 25 pacientes iniciaron el régimen de diálisis diaria, 11 de ellos lo hicieron en sus domicilios y 13 en una unidad de cuidado especial. La presencia de comorbilidad en los pacientes fue casi habitual; 23/25 de los pacientes presentaron una condición significativa asociada y la mitad del total de sujetos presentó patología cardiovascular.Las motivaciones fundamentales que los pacientes refirieron para la adopción de la estrategia propuesta, fue la mala tolerancia en relación con regímenes previos y la búsqueda de mejores tratamientos.La frecuencia de realización fue considerada individualmente y la mayoría de ellos lo hizo en forma diaria.En comparación con registros efectuados en una línea de base la eficiencia de la diálisis se incrementó y los datos clínicos principales mejoraron, a pesar del potencial efecto de confusión de la comorbilidad.Los resultados de la investigación demostraron que la diálisis diaria evidenció las ventajas de un enfoque fisiológico altamente efectivo.La información ofrecida a los pacientes constituyó una estrategia importante para el compromiso de los participantes y la posibilidad de elección del mejor tratamiento.Las ventajas de la práctica domiciliaria se relacionaron con la realización de los procedimientos en días de semana y en cualquier momento del día; asistidos en general por enfermeras.Los autores manifestaron que a pesar de los innegables esfuerzos por ellos realizados, la diálisis diaria fue percibida por algunos pacientes como muy limitante de sus actividades diarias y finalmente dejaron el tratamiento para continuar con el método convencional.Desde el punto de vista clínico la experiencia en pacientes con elevada comorbilidad fue suficientemente importante y permitió la confirmación de la efectividad del mismo en individuos con cierto grado de debilidad.Las conclusiones que demostraron los investigadores permitieron que la implementación de la estrategia con carácter flexible se expandiera con rapidez en el centro. El recurso ofrecido constituye un buen tratamiento para los pacientes jóvenes y activos, deseosos del "mejor tratamiento" y para los sujetos con múltiples comorbilidades.Se sugiere el desarrollo de nuevas estrategias, que incluyan la incorporación de más centros y la asistencia del personal de enfermería, para el logro de mayor disponibilidad del procedimiento.