Informes comentados


SM.gif Salud Mental SM.gif
 
Informe
Resumen SIIC
AC Costa
Institución: Faculdade de Medicina da Universidade de São Paulo (FMUSP),
São Paulo Brasil

El Uso de Cannabinoides no Debe Considerarse como Tratamiento de Primera o Segunda Línea de los Trastornos Neuropsiquiátricos Prevalentes en la Vejez
El uso de cannabinoides como medicamentos terapéuticos ha aumentado entre las personas de edad avanzada, y demuestran resultados prometedores para el tratamiento de los trastornos neuropsiquiátricos frecuentes en este grupo poblacional. Sin embargo, no deben considerarse como terapia de primera o segunda línea de la enfermedad de Parkinson o la enfermedad de Alzheimer.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/173006


Comentario
Autor del comentario
Cristóbal Espinoza 
Universidad Católica de Cuenca, Azogues, Ecuador


El sistema endocannabinoide (SEC) regula el comportamiento alimentario, la memoria, la ansiedad y la respuesta al estrés. En particular, los adultos mayores utilizan cannabinoides, como el cannabidiol (CBD), el tetrahidrocannabinol (THC) sintético y el extracto de cannabis. Su administración alivia el dolor, mejora el sueño y aborda los síntomas de ansiedad y depresión. En el resumen objetivo El Uso de Cannabinoides no Debe considerarse como Tratamiento de Primera o Segunda Línea de los Trastornos Neuropsiquiátricos Prevalentes en la Vejez se describen a los cannabinoides como opciones farmacológicas para el tratamiento de trastornos neuropsiquiátricos en adultos mayores.1
Estudios preclínicos indican que el CBD posee efectos antiamiloidogénicos, antioxidantes, antiapoptóticos, antiinflamatorios y neuroprotectores. Este sistema asume un papel esencial en la neurobiología de las enfermedades neurodegenerativas y
su modulación podría considerarse para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer (EA) y la enfermedad de Parkinson (EP).2 Cabe considerar, los efectos adversos relacionados con cambios en la cognición y las habilidades motoras, la ataxia, la disforia y la dependencia, asociados a la dosis de THC. El cannabis no parece aliviar los síntomas motores, pero se asocia con disminución del temblor, la ansiedad y el dolor, así como con mejora en la calidad del sueño y la calidad de vida. El uso de CBD demostró resultados favorables en sujetos con EP, con reducción de los síntomas psicóticos, mejoría del sueño y de la calidad de vida.2, 3
Destacan dos fármacos orales derivados de cannabis disponibles en comprimidos orales: el dronabinol y la nabilona; estos se administran para estimular el apetito en personas con anorexia relacionada con el síndrome de inmunodeficiencia adquirida o náuseas y vómitos inducidos por quimioterapia. Asimismo, se dispone de una combinación de THC y CBD, en forma de aerosol bucal, para el tratamiento de la espasticidad y el dolor en la esclerosis múltiple. En contados ensayos clínicos aleatorizados se han incluido exclusivamente a adultos mayores. 2, 3
Se ha descrito la eficacia del dronabinol (2.5 mg/d) en el tratamiento de la anorexia y los trastornos de conducta en personas con EA grave (n = 12; 11 hombres; edad media 72.7).2 En particular considerando factores como las comorbilidades, polifarmacia y la vulnerabilidad de las personas con demencia se requiere un seguimiento y una supervisión médica apropiada para evitar el sesgo de Berkson. El dronabinol (2.5 mg/d) se destaca por su reducción en la agitación nocturna en personas con EA. El reducido número de individuos incluidos en estos estudios y la exclusión de individuos con enfermedad grave o leve que produce un sesgo de Neymanque influye en el efecto estimado del fármaco.3
En un ensayo clínico doble ciego efectuado con pacientes de al menos 60 años con diagnóstico de trastorno neurocognitivo mayor y trastornos conductuales asociados a los que se administró Avidekel, un aceite de cannabis de amplio espectro (30% de CBD y 1% de THC: 295 mg y 12.5 mg por ml, respectivamente; n = 40) o un aceite placebo (n = 20) tres veces al día durante 16 semanas, se observó una disminución en comparación con el valor inicial, de cuatro o más puntos en la puntuación del inventario de agitación de Cohen-Mansfield en la semana. En efecto, se redujo la agitación en comparación con el placebo en pacientes que sufrían trastornos del comportamiento relacionados con la demencia. En particular, es importante mencionar que ocho pacientes que interrumpieron el tratamiento con Avidekel pertenecían al grupo de investigación.6
En gran parte de los ensayos clínicos no se informó reacciones adversas graves relacionadas con el tratamiento, pero el pequeño número de participantes resultó en un poder insuficiente para generalizar conclusiones firmes sobre los beneficios del cannabis medicinal. Aunque varios estudios han investigado la farmacocinética y las vías de administración del cannabis y los cannabinoides en la población general, pocos estudios han evaluado la farmacocinética del THC en adultos mayores.4 La falta de información sobre la seguridad y eficacia del cannabis y los cannabinoides en adultos mayores justifica efectuar ensayos controlados aleatorizados con la potencia adecuada para evaluar la evidencia y la relación riesgo-beneficio del cannabis medicinal en personas mayores.5
Las revisiones sistemáticas y metanálisis que evaluaron el impacto de los compuestos de cannabis en los trastornos del movimiento y la EP, no se sustenta generalizar en este grupo etario el uso de estos agentes. En efecto, se requiere mantener ensayos in vivo e in vitro con el firme objetivo y urgente necesidad de observar si la modulación del sistema endocannabinoide con CBD sustenta el tratamiento y prevención de la EA.2 Copyright © SIIC, 2024 Bibliografía 1. Costa AC, Joaquim HPG, Aprahamian I. Cannabinoids in Late Life Parkinson's Disease and Dementia: Biological Pathways and Clinical Challenges. Brain Sciences, 12 (12), 2022. 2. Volicer L, Stelly M, Morris J et al. Efectos del dronabinol sobre la anorexia y la conducta alterada en pacientes con enfermedad de Alzheimer. Int J Geriatr Psychiatry, 12: 913 – 919, 1997. 3. Walther S, Schüpbach B, Seifritz E et al. Ensayo cruzado, aleatorizado y controlado de dronabinol, 2,5 mg, para la agitación en 2 pacientes con demencia. J Clin Psychopharmacol, 31 : 256 – 258, 2011.
4. Carroll CB, Bain PG. Teare L et al. Cannabis para la discinesia en la enfermedad de Parkinson: un estudio cruzado, aleatorizado y doble ciego. Neurología, 63: 1245 – 1250, 2004.
5. Ahmed AI, Van den Elsen GA, Van der Marck MA, Olde Rikkert MG. Medicinal use of cannabis and cannabinoids in older adults: where is the evidence? J Am Geriatr Soc, 62(2):410-1, Feb 2014.
6. Hermush V, Ore L, Stern N, Mizrahi N, Fried M, Krivoshey M, et al. Effects of rich cannabidiol oil on behavioral disturbances in patients with dementia: A placebo controlled randomized clinical trial. Front Med (Lausanne), 6; 9:951889, Sep 2022.

Palabras Clave
cannabis, cannabinoides, THC, CBD, ancianos
Especialidades
Ge.gif   SM.gif         F.gif   MI.gif   
Informe
Resumen SIIC
Chunyue Qiu
Institución: Macao Polytechnic University,
Macao China

Ejercicios de Habilidades Cerradas y Abiertas en Sujetos con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad
Se recomienda que las personas con trastorno por déficit de atención e hiperactividad realicen ejercicios para múltiples tipos de habilidades motoras, ya que esto mejora la función ejecutiva.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/174964


Comentario
Autor del comentario
Alberto Emiliano D´Agostino(1) Ladislao Pablo Matías Díaz Ballve(2) Tatiana Dias de Carvalho(3)  

(1) Universidad Nacional de José C Paz, José C. Paz, Argentina
(2) Universidad Nacional de La Matanza, San Justo, Argentina
(3) Universidad Nacional de La Matanza, San Justo, Argentina


El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) se caracteriza por dificultades en la concentración, impulsividad y comportamientos hiperactivos. Estas alteraciones conductuales están subordinadas a las funciones ejecutivas, ubicadas por algunos autores en tres dimensiones: flexibilidad atencional, control inhibitorio y memoria de trabajo.1 Aunque generalmente se manifiesta en la infancia, entre el 40% y el 60% de los casos persisten en la adultez. La evidencia creciente señala que el TDAH en adultos es un problema de salud significativo, asociado a comportamientos de riesgo y otros trastornos psiquiátricos, que afectan diversas áreas de la vida, como el ámbito psicosocial, académico, laboral y el acceso a los servicios de salud.2 La dificultad en el diagnóstico radica en la frecuente coexistencia de comorbilidades psiquiátricas o
trastornos por abuso de sustancias.3
El tratamiento requiere un enfoque personalizado, con el objetivo principal de mejorar los síntomas centrales del TDAH y optimizar el funcionamiento general. La intervención incluye abordajes psicológicos, conductuales y farmacológicos. Los medicamentos que suelen ser indicados se dividen en dos categorías: estimulantes y no estimulantes. Entre los primeros se incluyen el metilfenidato, la lisdexanfetamina y la dexanfetamina; en el grupo de los no estimulantes se encuentran la guanfacina y la atomoxetina.3,4 Con respecto a las intervenciones no farmacológicas el ejercicio físico terapéutico se asocia con un impacto favorable en la población pediátrica con diagnóstico de TDAH. No obstante, resulta complejo establecer una relación directa, dado que esta terapia suele aplicarse en combinación con otras intervenciones como la psicológica o la farmacológica. Por ello, es necesario realizar ensayos clínicos que identifiquen el efecto terapéutico de cada estrategia individualmente o de la sumatoria de ellas.5 Varios autores destacan que el ejercicio aeróbico también puede mejorar el rendimiento cognitivo en adultos con TDAH, posiblemente a través de mecanismos relacionados con la fisiología cerebral influenciada por la actividad física.2,4,6 Por otro lado, las habilidades motoras cerradas y abiertas difieren en cuanto a las características del entorno y los requisitos del movimiento. Las habilidades motoras cerradas se realizan en un entorno estable y controlado, lo cual implica movimientos relativamente constantes en los que predomina la ejecución técnica. En cambio, las habilidades motoras abiertas se desarrollan en entornos variables y sin restricciones, que exigen equilibrio dinámico, reacciones en tiempo real y una alta capacidad de toma de decisiones, con énfasis en la toma de decisiones.7,8 Con el objetivo de aportar evidencia científica para mejorar el tratamiento del TDAH mediante la prescripción de ejercicio, el resumen objetivo Ejercicios de Habilidades Cerradas y Abiertas en Sujetos con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad aborda una revisión sistemática y un metanálisis para evaluar el impacto del ejercicio en personas con esta condición. El estudio conjugó las interacciones entre los distintos tipos de habilidades motoras en diferentes intensidades, con sus efectos en las funciones ejecutivas en personas con TDAH. Para su realización se siguieron las guías metodológicas recomendadas para este tipo de investigaciones,9 que conducen a una exhaustiva búsqueda bibliográfica con base en datos científicos, tanto generales como especializados. Posteriormente, se evaluó la calidad metodológica de los estudios incluidos utilizando herramientas de análisis de riesgo de sesgo adecuadas para cada tipo de investigación. Como resultado, los autores encontraron que tanto el ejercicio de habilidades cerradas como abiertas mejoran el rendimiento de la función ejecutiva en adultos con TDAH. Concluyeron que un ciclo de intervención de más de doce semanas, con una frecuencia superior a dos sesiones semanales de ejercicio moderado o de alta intensidad, puede constituir una dosis adecuada de ejercicio para esta población, aunque no esclarecen sobre qué función ejecutiva tiene efectos cada habilidad motora.
También destacan que, aunque los ejercicios de habilidades abiertas fueron significativamente más efectivos que los de habilidades cerradas para mejorar la función inhibitoria, no se observó el mismo efecto en la memoria de trabajo. Esto podría explicarse porque los ejercicios de habilidades cerradas se realizan en un entorno estable y predecible, lo que reduce la carga cognitiva. Este hallazgo resalta la especificidad de los efectos sobre las funciones ejecutivas en función del tipo de intervención motora, que diferencia entre los beneficios de las habilidades abiertas y cerradas. De este modo, parece ser el único hallazgo que aborda con detalle el tipo de ejercicio, la intensidad y su efecto en una función ejecutiva particular.
La inclusión de participantes de hasta 50 años para ampliar la población estudiada podría ocultar resultados específicos en ciertos grupos. De hecho, los autores señalan discrepancias en los hallazgos sobre los efectos en la memoria de trabajo, posiblemente atribuibles a las diferencias entre las poblaciones de estudio y al número limitado de investigaciones disponibles de esta temática.
Consideramos importante señalar algunas limitaciones como la ausencia de información sobre el estado inicial de los participantes y la falta de especificación de la escala utilizada para evaluar las funciones ejecutivas en las distintas muestras antes y después del plan de trabajo. Esto genera incertidumbre sobre la comparabilidad de los resultados, ya que podrían haber sido medidos con parámetros distintos. Tampoco se menciona el nivel de heterogeneidad en las características personales y psicosociales, factores que influirían en los resultados observados, incluso es posible que se registren efectos similares en personas con desarrollo típico.11 El estudio ofrece a los profesionales del área evidencia para fomentar la participación de personas con TDAH en intervenciones y ejercicios físicos como opción de tratamiento no farmacológico, considerando los efectos neurofisiológicos que el propio ejercicio genera. No obstante, no queda completamente claro si las mejoras en las funciones ejecutivas se deben a las propuestas específicas de ejercicios de habilidades cerradas o abiertas, o simplemente al hecho de que el ejercicio físico de intensidades moderadas y altas conlleva beneficios neurofisiológicos. De hecho, los autores advierten sobre la precaución de extrapolar estos resultados a todas las intensidades, ya que el estudio solo incluyó ejercicios de intensidades moderadas y altas. A pesar de ello, es significativo el aporte que señala el impacto del ejercicio físico en las funciones ejecutivas en general, destacando su importancia como opción de tratamiento no farmacológico en personas con TDAH.
Para concluir, consideramos que, a partir de lo presentado en la revisión, el ejercicio físico de intensidades moderadas en un programa de más de doce semanas con una frecuencia de más de dos veces semanales tiene efecto en las funciones ejecutivas en personas con TDAH. Además, resultaría relevante que futuras investigaciones tomen en cuenta las características personales y las circunstancias específicas que influyen en cada grupo. Es crucial comprender los efectos de diferentes tipos de actividades físicas en poblaciones con TDAH, prestando atención tanto a las particularidades de la condición como a su contexto psicosocial y ecológico. Asimismo, resulta de gran valor clínico disponer de evidencia que avale los efectos de diversas actividades físicas o ejercicios sobre las funciones ejecutivas, diferenciando estos de los efectos asociados a la intensidad del ejercicio en sí. Al mismo tiempo, queda por esclarecer sobre qué función ejecutiva tiene mayor efecto cada tipo de habilidad motora. Esto permitiría optimizar el uso del ejercicio como una opción de tratamiento no farmacológico. Copyright © SIIC, 2024
Bibliografía
1. Miyake A, Friedman NP, Emerson MJ, Witzki AH, Howerter A, Wager TD. The unity and diversity of executive functions and their contributions to complex "Frontal Lobe" tasks: a latent variable analysis. Cogn Psychol. 41(1):49-100, 2000.
2. Baggio S, Fructuoso A, Guimaraes M, Fois E, Golay D, Heller P, Perroud N, Aubry C, Young S, Delessert D, Gétaz L, Tran NT, Wolff H. Prevalence of Attention Deficit Hyperactivity Disorder in Detention Settings: A Systematic Review and Meta-Analysis. Front Psychiatry. 9:331, 2018.
3. Velarde M, Anicama A, Cárdenas A. Déficit de atención con hiperactividad: farmacoterapia a través de la vida. Medicina (B Aires). 83 Suppl 4:40-45; 2023.
4. Medicines Optimisation: The Safe and Effective Use of Medicines to Enable the Best Possible Outcomes. NICE Medicines and Prescribing Centre (UK), Mar 2015.
5. Romero Sánchez C, Calvo Muñoz I. Efectos del ejercicio físico terapéutico en jóvenes con trastorno por déficit de atención e hiperactividad: revisión sistemática. Fisioterapia. 44(2):111-118, 2021.
6. Ward JH, McBride A, Price A, Delgado TN. Psychosocial interventions for improving the physical health of young people and adults with attention deficit hyperactivity disorder: a scoping review. BMC Psychiatry 24(1):569, 2024.
7. Pons Bauzá J, Ramis Laloux Y, Viladrich C, Checa Esquiva I. Niveles de ansiedad y estilos de afrontamiento en función de las características perceptivo-motoras del deporte. Revista de Psicología del Deporte. 29(2):105-115, 2020.
8. Schmidt RA. Motor learning and performance. 2°ed.; Human Kinetics: Champaign, IL, EE.UU., 2000.
9. Page MJ, McKenzie JE, Bossuyt PM, Boutron I, Hoffmann TC, Mulrow CD, Shamseer L, et al. The PRISMA 2020 statement: an updated guideline for reporting systematic reviews. Rev Esp Cardiol74(9):790-79, Sep 2021. Erratum in: Rev Esp Cardiol. 75(2):192, 2022.
10. Igelström E, Campbell M, Craig P. Cochrane's risk of bias tool for non-randomized studies (ROBINS-I) is frequently misapplied: A methodological systematic review J Clin Epidemiol140, 22-32, 2021.
11. Moureira CF. Efectos del ejercicio físico sobre las funciones ejecutivas: una revisión del 2010 al 2016. EmásF. Revista Digital de Educación Física 8(43):110-125, 2016.


Palabras Clave
trastorno por déficit de atención e hiperactividad, control inhibitorio, flexibilidad cognitiva, memoria de trabajo, metanálisis
Especialidades
K.gif   SM.gif         Ep.gif   Fi.gif   Ne.gif   P.gif   SP.gif   
Informe
Resumen SIIC
W Xu
Institución: Tianjin Medical University,
Tianjin China

La Incidencia de Caídas Perjudiciales Aumenta Previamente al Diagnóstico de Demencia
Existe la necesidad de estrategias específicas de prevención de caídas para las personas con demencia, especialmente poco después del diagnóstico de demencia.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/173009


Comentario
Autor del comentario
Milton Carlos Gonzáles Mechan 
Hospital Nacional Almanzor Aguinaga Asenjo, Chiclayo, Perú


El resumen objetivo La Incidencia de Caídas Perjudiciales Aumenta Previamente al Diagnóstico de Demencia aborda un estudio de casos y controles donde se compara la variable demencia en un grupo que tiene la patología y en otro grupo que no la tiene, en ambos grupos se buscaron factores como la caída desde 10 años antes del diagnóstico de demencia. El estudio se realizó en Suecia, se incluyeron 2707 participantes, el diagnóstico de demencia y la fecha de inicio de la demencia se identificaron en el Registro Nacional de Pacientes (RNP) y el Registro Sueco de Causas de Muerte siguiendo criterios internacionales. La información sobre caídas perjudiciales y antecedentes de enfermedades crónicas se obtuvo del RNP.  Al respecto, no se especifica si al registró del
paciente en estudio diagnósticado con demencia se le realizó una evaluación exhaustivamente previa al diagnóstico, si hubo otros diagnósticos que se prestaran a confundir con demencia progresiva, como el Alzheimer o la demencia vascular, por ejemplo, cuya evolución es progresiva con intermitencia de estacionamiento evolutivo y problemas en la ejecución, la cual a nivel de miembros inferiores podría caracterizar la inestabilidad y las caídas por un buen tiempo.
Bajo mi punto de vista, con relación a la asociación de caídas y demencia, debo comentar lo siguiente: las caídas en el adulto mayor es un predictor y consecuencia del síndrome de fragilidad que viene hacer una condición clínica que se presenta en el adulto mayor y cuya incidencia aumenta conforme pasan los años. El que el estudio concluya que las caídas perjudiciales se presentan como predictor de demencia, se tendría que evaluar la covariable fragilidad y ajustar estadísticamente su relación con demencia. Lo que sí está claro es que una vez que el paciente se le diagnostica demencia, existe un porcentaje de 2 a 3 veces la incidencia de caídas con relación a los pacientes que no tienen demencia, y es que la fragilidad también se presenta en ancianos que hacen demencia.
Copyright © SIIC, 2024

Palabras Clave
caídas perjudiciales, demencia incidente, análisis de casos y controles emparejados, estudio basado en la población, ancianos
Especialidades
Ge.gif   SM.gif         Ep.gif   OT.gif   SP.gif   
Informe
Resumen SIIC
AC Costa
Institución: Faculdade de Medicina da Universidade de São Paulo (FMUSP),
São Paulo Brasil

El Uso de Cannabinoides no Debe Considerarse como Tratamiento de Primera o Segunda Línea de los Trastornos Neuropsiquiátricos Prevalentes en la Vejez
El uso de cannabinoides como medicamentos terapéuticos ha aumentado entre las personas de edad avanzada, y demuestran resultados prometedores para el tratamiento de los trastornos neuropsiquiátricos frecuentes en este grupo poblacional. Sin embargo, no deben considerarse como terapia de primera o segunda línea de la enfermedad de Parkinson o la enfermedad de Alzheimer.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/173006


Comentario
Autor del comentario
Rosario Guevara 
Universidad Central de Venezuela, Caracas, Venezuela


Este artículo da a conocer un interesante hallazgo: el uso terapéutico de cannabinoides en los adultos mayores y los resultados obtenidos para los trastornos neuropsiquiátricos más frecuentes en este grupo. De acuerdo al mismo, se han encontrado beneficios del uso de cannabinoides en la población de los adultos mayores. Tener en cuenta el ciclo de vida en el ser humano es muy importante al diseñar y ejecutar distintos planes de acción, para mejorar la calidad de vida de las personas.
Para el uso de cannabinoides en los adultos mayores, es necesario considerar varios factores como: edad del paciente, número de dosis, adherencia al tratamiento. Debe ser prescrito por un médico especialista en el área y con experticia en la población mayor y su uso
debe ser totalmente con fines médicos y no de otra índole; debemos combatir el uso de medicamentos que no sean con fines terapéuticosy de orden médica. El uso de ciertos calmantes puede ayudar al paciente en el alivio de su dolor físico, lo que es fundamental, por ejemplo, en casos de pacientes que se encuentran en etapa terminal debido al padecimiento de cáncer. Muchas veces su sufrimiento es ilimitado y, al aliviar el dolor del paciente, se le permitirá una partidadigna. El cuidador y familiares se sentirán más tranquilos al ver disminuir el dolor físico en su ser querido.
Siempre hay que tener presente que los fármacos deben ser indicados por el especialista y, a su vez, el paciente debe ser supervisando ante cualquier efecto secundario.Al ser una población de riesgo o vulnerabilidad en diferentes sentidos, entre los cuales se puede aludir algunos: por lo general el adulto mayor se encuentra viviendo solo, es poco frecuentado por sus familiares, tiende a aislarse, su vínculo social es disminuido, pueden estar afectados por la poca actividad social y laboral, entre otros. Todos los medicamentos generan efectos secundarios, por eso hay que tener en cuenta la vulnerabilidad del paciente, sobre todo en los adultos mayores que tienden a estar medicados por distintas dolencias.
La enfermedad de Parkinson como trastorno degenerativo, también implica la posibilidad del desarrollo de otras enfermedades mentales, como son la ansiedad y depresión, lo que complica el estado de salud física y mental. Siendo diferentes enfermedades a las cuales combatir de una vez. Por otra parte, las enfermedades neuropsiquiátricas son diversas y la característica crónica que las identifican, conllevan a necesitar medicación permanente para estabilizar al paciente y dentro de lo posible evitar mayor deterioro, tanto físico como mental. Esto implica la inversión de dinero para adquirir los medicamentos, acceder a las consultas médicas y cualquier otro implemento que se requiera. Además, la demanda de varias personas que estén involucradas afectivamente y le brinden al paciente atención ante los cuidados necesarios.
El impacto físico, psicosocial y económico de estas enfermedades afectan en gran medida tanto al paciente como a sus familiares. Es decir, la repercusión abarca distintos contextos que deben afrontarse de manera positiva en busca de soluciones y existen diversos modos de abordaje en el ámbito de la salud. Ciertamente uno de ellos es la medicación, pero desde el punto de vista psicológico, encontramos un gran recurso como es la psicoterapia y neuropsicología. Sumado a esto, es relevante destacar los aportes que existen de la psicoterapia, neurorehabilitación, redes de apoyo y la adquisición de técnicas de afrontamiento en la resolución de problemas para las personas mayores. Conduciendo a mejorar su calidad de vida.
Por ejemplo, muchos son los beneficios de la neurorehabilitación en el caso de estas enfermedades, recordando la vulnerabilidad genética, la estadía en ese ciclo de vida, el deterioro cognitivo propio de la edad, el ambiente familiar y social en el cual se desarrolla la persona. Por eso son necesarias e importantes las redes personales y de apoyo que pueda tener el paciente. Mientras más amplia sea la reserva cognitiva del paciente, mejor será la ejecución de sus áreas cognitivas, entre éstas la atención y memoria.
Se requieren mayores investigaciones en los cuales nos den más conocimientos en el uso de cannabinoides en los adultos mayores. Este artículo es un aporte a tener en cuenta. Desde el abordaje integral, lo que se pretende es que la calidad de vida del paciente cada día sea mejor y aumente su bienestar personal. Sin duda alguna, al mejorar la calidad de vida del paciente, el sentir y la situación del familiar o cuidador también serán más satisfactoria.

Palabras Clave
cannabis, cannabinoides, THC, CBD, ancianos
Especialidades
Ge.gif   SM.gif         F.gif   MI.gif   
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